EXCLUSIVO. El desgarrador y grave testimonio de la ex trabajadora del Congreso de la República que denuncia que el congresista de APP, Freddy Díaz Monaro, la violó y la dejó inconsciente y encerrada en el despacho en el que ambos laboraban. Su extenso y pormenorizado relato compromete seriamente al suspendido parlamentario.
Casi a las 2 de la madrugada del 27 de julio pasado, la cámara de un celular capta al congresista Freddy Díaz, de Alianza para el Progreso, saliendo rápidamente de su oficina parlamentaria y en actitud huidiza hasta el estacionamiento subterráneo del edificio del jirón Azángaro.
Casi nadie sospecha que dentro de su oficina, yace inconsciente, exactamente en el mueble que se aprecia en la imagen, una trabajadora de su despacho que, días después, lo denunciaría por violación sexual.
El congresista Díaz, quien siguió laborando como si nada y recién acaba de ser suspendido por 120 días, ha reconocido que aquella madrugada del 27 de julio estuvo bebiendo en el Congreso, pero ha negado el abuso sexual.
Es por ello que, aunque le cause dolor, la víctima ha decidido hablar y ratificar su versión dada ante la Fiscalía, en una entrevista que ha concedido ampliamente y en exclusiva a Epicentro Tv.
Dice la denunciante de presunta violación sexual por el congresista Freddy Díaz:
Mientras más repita mi historia, si eso sirve de algo, pues, lo voy a hacer, así me duela, así me quiebre, así me ponga a llorar, y después de esta entrevista estoy segura de que voy a ir a mi casa y voy a estar peor, (empieza a llorar) pero no me importa, porque todo lo que quiero es verlo preso".
Antes de oír los detalles de este duro relato, señalaremos que este reportaje no contiene los descargos del suspendido congresista Freddy Díaz Monago ni la intervención de su defensa. El primero guardó silencio ante nuestro requerimiento por escrito, y su abogada, Katty Cachay, dijo que por decisión de su cliente, el parlamentario, no ofrecerían declaraciones.
Epicentro Tv, sin embargo, resumirá extractos relevantes de la declaración de Díaz ante la Segunda Fiscalía Penal que lo investiga.
Este portal no solo ha recogido el testimonio de la denunciante. También ha revisado la carpeta fiscal y, especialmente, su relato ante la Cámara Gesell, que es el proceso de preguntas por el que pasa una víctima de violación sexual.
El inicio de todo
Todo empieza el 26 de julio, cuando Lady Camones, también de APP, fue elegida presidenta del Congreso.
Horas después, Freddy Díaz y otros dos parlamentarios de su bancada llegan a su despacho y veinte minutos más tarde cruzan el pasadizo para entrar a la oficina de otro congresista de APP. Allí empieza la celebración con alcohol. Antes de las 8 de la noche Díaz vuelve a su despacho en compañía de su guardaespaldas. Es entonces, según la denunciante, cuya identidad protegeremos en todo momento, cuando empieza su pesadilla.
Dice la denunciante de presunta violación sexual por el congresista Freddy Díaz:
Como yo estaba esperando que el congresista apruebe el informe anual de trabajo, tenía que subirlo al sistema, entonces, esa era otra de mis razones para esperarlo, porque decía que tengo que subirlo de una vez porque estamos ya casi en fecha límite".
Y luego me dice: “¿sabías que acá la gente se pone q tomar?” y yo le digo: “ah, sí, claro, de otras áreas también me han dicho oye, ven acompáñanos”, pero, yo, sinceramente, prefiero evitar, le dije".
-¿Y eso es constante, entre paréntesis?
Responde la denunciante:
Pues, bajo relatos de otras personas, que me decían, sí, de otras áreas.
Y me dice “ay, pero, ¿quién se va a enterar? Aparte, ha ganado Lady Camones, tú y yo nunca nos hemos sentado a brindar así. “Un brindis”, me dice. “¿Qué es un brindis?".
Según la versión de la extrabajadora del Congreso, a quien llamaremos simplemente “MP”, Díaz está sentado en su asiento de costumbre. Ella, en uno de los asientos frente a él. Sostiene que se siente presionada a aceptar el trago, por la condición de poder del congresista. Luego, según relata, Díaz se pone de pie y camina hacia este mueblecillo para sacar de allí la primera botella de licor, la misma que terminaron de beber.
Afirma "MP":
Y cuando terminamos la primera botella le dije “bueno, ya me voy”, y él me dice “ay, ¿cómo te vas a ir tan temprano? Espérate un rato. A ver, voy a ver qué más hay en mi repisa”. Se va a su repisa, me da la espalda y se queda mirando ahí".
Regresó y sirvió, yo miré la botella…".
-¿Era el mismo trago?
No, yo miré la botella y dije “esto es wisky”, y le dije “no, es que esto a mí me va a marear, nooo”, le digo, “además, ya es tarde”. Y me dice “ya pues, no te hagas, todo el año tú dices no tomo, no tomo, ya pues, ya, toma, toma”, como dándome una orden. Y yo dije, en mi cabeza dije “ya, lo acompaño con dos vasos, un vaso, y me voy".
Entonces, el parlamentario empieza a abrir la botella de wisky. En este instante de su relato, “MP” recuerda un detalle clave, que no había revelado en su entrevista en la Cámara Gesell.
Dice "MP":
Hay algo que no he mencionado en la Cámara Gesell. Que cuando él abre la botella de wisky, o sea, cuando me dice “vamos a tomar eso”, sirve el primer vaso y luego dice “oye, pero, ¿sabes qué?, si te voy a contar cosas, esta conversación es privada, mejor le echo seguro a la puerta”. De su despacho. Y yo dije “¿Hm?”. Le echó seguro a su puerta".
-Mira, te has podido acordar de ese detalle. ¿Estaba cerrada la puerta o estaba entreabierta?
Cerrada. Le puso seguro".
-Entonces, no era necesario que le echara seguro, si ya estaba cerrada.
Ujúm".
-Tú escuchaste el sonidito del seguro.
(Asiente con la cabeza).
-Le echó seguro.
(Asiente con la cabeza).
Ante la Fiscalía, Freddy Díaz reconoce que bebieron, no una, sino dos botellas completas. Ella, que dos vasos después de iniciar la segunda, perdió el conocimiento. Para entonces, el reloj marca las 11 o quizá las 11:30 de la noche. Díaz huye de la escena poco antes de las 2 de la mañana y aproximadamente a las 4 de la madrugada del 27 de julio, “MP” despierta.
-Y te levantaste a las 4 de la mañana, te despertaste a las 4 de la mañana.
"MP", denunciante de presunta violación sexual por el congresista Freddy Díaz:
(Asiente con la cabeza).
-Apareciste sola en el despacho.
Sí, sola".
-¿En dónde estabas? ¿En la misma silla?
No, en su sillón. Detrás de esa silla había un sillón de tres cuerpos. Y aparecí allí, boca abajo".
-Boca abajo.
(Asiente con la cabeza).
Este es el sillón en el que despierta “MP”.
--Poner nuevamente la foto del sillón.
“MP” Nota que ya no está más en la silla del escritorio del congresista. Aún adormilada y adolorida, advierte, para su espanto, que ya no lleva puesta su ropa interior. Sospecha de inmediato que ha sido vejada.
Queremos advertir en este punto que la entrevista trata de ser coherente con evitar la revictimización de quien denuncia, pero que hay detalles que resultan fundamentales para establecer los hechos.
-Perdón, ¿qué hiciste… tu ropa…
Con la panty a medias, mi vestido a la altura de la cintura".
-O sea, ¿subido?
Sí".
-¿Y tus pantys, qué me decías?
Mal acomodados, o sea, bajados un poco".
-¿Y qué sentiste… empezaste a sospechar algo en ese momento, estabas confundida?
Estaba confundida. Yo dije para mis interiores, pensé “algo me ha pasado”. Pero estaba en modo negación porque yo no quería creer que me había pasado, no, no quería imaginarme lo peor en ese momento. Pero sí me levanté con un dolor horrible, horrible, acá en mi coxis".
-¿No te podías poner de pie fácilmente?
No".
-Perdóname que te haga esta pregunta. ¿Empezaste a revisar, además de tu vestido y tu panty, tu ropa interior?
No había ropa interior, o sea, cuando veo, no tenía mi ropa interior".
-¿Estabas sin ropa interior?
Ujúm. Como te digo, en ese momento yo dije “algo me ha pasado”, pero no lo quería creer, y dije “no, ¿acá en el trabajo?".
-¿Pero, internamente sospechabas que se trataba de un abuso, de una violación?
Inocentemente, la verdad, creí que, no sé, sólo me había visto o algo, algo así. Pero, después decía “¿por qué me duele?”. No sé, estaba confundida".
Y ya a eso de las 5, 5:15 de la mañana es que yo, se puede abrir la puerta finalmente, finalmente, y ahí estaba, pues Arturo…".
-Perdóname, antes de eso. ¿Tú empezaste a revisar la escena, la oficina? ¿Qué hiciste en todo ese momento?
No sé… Creo que me puse a llorar. Y más no recuerdo. Solo recuerdo que vi mi celular, sí, porque quería saber qué hora era y vi que me estaba llamando todo el mundo".
Uno de los que la llama insistentemente es “Arturo”, un amigo suyo que también trabaja en el Congreso y que frecuentemente la espera en las noches para marcharse juntos. Aquella noche, “Arturo” no ve salir a “MP”. Sospecha que algo anda muy mal con su amiga y se queda rondando la puerta del despacho del congresista durante todas esas horas de pavor.
Llama a la Comisaría de San Andrés, que envía efectivos pero que no puede ingresar a la sede.
Es “Arturo” quien lo graba, precisamente, ve a Freddy Díaz salir y huir por las escaleras. Y después comprueba que su amiga ha sido encerrada en el propio despacho en el que laboraba. La puerta está con llave. Personal de seguridad del Congreso, que es consignado en las declaraciones, es alertado, pero no hace mucho esfuerzo. Por fin, a las 4 de la madrugada, cuando reacciona, “MP” escucha a Arturo golpear la puerta.
Cuando abro, “Arturo” me encuentra con la nariz ensangrentada, desacomodada, desarreglada".
-¿No te habías dado cuenta de tu nariz sangrante?
No, porque no quería verlo, no quería verme…".
-¿No te viste en el espejo del baño?
No quería verme a mí misma. En ese momento solo tenía vergüenza, miedo, y estaba en un estado de negación. Porque Arturo me decía “¿qué te ha pasado?”. “No, no me ha pasado nada, nada, no".
-¿Tu nariz estaba golpeada, había signos de algún golpe, tenías algún moretón, estaba hinchada?
Internos, porque sí me dolía la nariz, en los días posteriores sí me dolía la nariz. Pero moretones así, no".
“Arturo” también ha brindado su declaración ante los investigadores del caso y su relato es de espanto. Ha dicho que cuando al fin abre la puerta, su amiga está tambaleante, confundida y con sangre en ambas fosas nasales, que la oficina congresal está sucia, con botellas vacías, restos de licor, manchas que parecían ser sangre y olor de vómitos.
Luego, “Arturo” revisa el baño del parlamentario y ve en la papelera un preservativo. Así lo ha declarado ante la Fiscalía.
El 3 de agosto rinde su declaración el suspendido congresista Freddy Díaz. Epicentro Tv tiene en su poder su declaración completa, en la que admite haber bebido y asegura haber tenido relaciones con quien en ese momento era su subordinada en el Congreso. Pero intenta en todo momento convertir la escena en una relación consentida. Por respeto a la dignidad de la denunciante, no la propalaremos.
Pero sí mencionaremos que Díaz habla de relaciones sexuales consentidas y que “en los últimos meses, desde el mes de febrero del presente año, (tuvieron) una relación de salidas no formales”.
Dice “MP”, denunciante de presunta violación sexual por el congresista Freddy Díaz:
Para empezar, yo nunca he tenido absolutamente nada con ese sujeto, puedo poner las manos al fuego, mostrar todo lo que tenga que mostrar para que se corrobore mi historia, mi verdad. Jamás, jamás he tenido nada con él, nada, como él lo ha dicho. Y, ojo, que él está mintiendo, está mintiendo ante un juzgado, y eso es delito, porque ha dicho eso, ha dicho que yo le invité a brindar. Pobrecito él, él se sintió obligado, seguramente".
Si me dio tanta confianza, como lo repite una y otra vez en esa entrevista, entonces, ¿por qué decidió sacarme si supuestamente yo tenía toda su confianza?".
-¿Él te había informado previamente… cuántas semanas antes del suceso, que tú ya no ibas a continuar laborando?
Dos semanas antes".
-¿Por qué?
Porque, bajo sus palabras, me dijo “yo no tengo nada contra tu trabajo, todo lo contrario, te agradezco porque has manejado muchas cosas, incluso algo que yo lo debía manejar de manera particular tú lo has hecho por mí, que es mi agenda, entre otras cosas, pero, lamentablemente tengo que pagar favores y tengo que traer a una persona de Pasco".
-¿Utilizó esa palabra, “favores”? ¿”Pagar favores”?
Sí, así dijo".
El examen médico legista de la denunciante es contundente. Hay lesiones en los muslos ocasionados por presión, “lesiones recientes” en sus zonas íntimas y “huellas de lesiones traumáticas recientes”.
La defensa de la denunciante ha pedido para el congresista Díaz prisión preventiva, que inicialmente fue denegada por un juez, pero que será reevaluada la próxima semana por pedido de la Fiscalía Suprema Penal, a cargo de la fiscal suprema Zoraida Ávalos.
Dice "MP":
Así la justicia no salga a mi favor, igual, yo ya estoy haciendo todo, todo lo posible para que se logre, para mitigar este dolor porque de verdad es horrible (llora). Dices “¿cómo es posible? La forma cómo me atacó sexualmente para mí es humillante, muy humillante, porque nadie que te respeta, nadie que dice al menos tener una relación esporádica contigo te deja tirada como basura, así".
Hay preguntas por esclarecer. Por ejemplo, ¿por qué el examen toxicológico de la extrabajadora, realizado el mismo 27 de julio, arroja negativo para alcohol, pese a que ella y Díaz han reconocido la ingesta de licor?
Además, el Ministerio de la Mujer, que defiende a “MP” se pregunta por qué el 27 de julio el parlamentario acudió, solo, a su despacho. Según esta defensa, ese día la escena del delito puede haber sido adulterada.
“MP” quiere llegar hasta el final y quiere ver preso a Díaz, quien reclama inocencia. Hay serias sospechas y Díaz debe responder todas las preguntas, absolutamente.
