Hemos llegado a Santiago de Chile. Estamos en los exteriores del excongreso de La República y aquí es donde 155 convencionales trabajan de lunes a sábado, desde las 9 de la mañana hasta a la medianoche, para sacar adelante el nuevo proyecto de Constitución que debe estar listo antes del 5 de julio, día en que termina el plazo de funcionamiento de la Convención.

Fue en julio pasado, durante el gobierno del presidente Sebastián Piñera, que esta Asamblea inició su trabajo en medio de altas expectativas. Significaba la salida institucional para salir de la crisis política sin precedentes que desató el estallido social del 2019. Sin embargo, según la última encuesta publicada por PULSO CIUDADANO, en abril, el “rechazo” a la convención creció a 40.5% mientras que “el apruebo” ha ido cayendo. Actualmente, solo cuenta con un 36% de aprobación.

"Hay un elemento de incertidumbre que genera un poco de temor, se elimino el senado en la propuesta de la convención constitucional y se reemplaza por una cámara de las regiones con la idea de generar un bicameralismo asimétrico ,donde ambas cámaras tenían las mismas cámaras y el numero de representación. hay una campaña de desprestigio y desinformación dando por ejemplo como aprobadas normas que han sido rechazadas", señala Claudia Heiss, analista política.

Además del “bicameralismo asimétrico”, un nuevo sistema legislativo que reemplaza al Senado por una Cámara de las Regiones, otro punto que ha sido motivo de controversia es la decisión de declarar a Chile como un Estado plurinacional e intercultural.

"Un cambio radical de que lo había acá en Chile se propone un país plurinacional que era una novedad para nosotros se proponen múltiples sistemas de justicia que es la raza precolombina de las personas y bueno varias cosas novedosas en cuarto aborto libre textos de ideología de género incorporados en el texto constitucional lo cual era una novedad en el mundo", sostiene Martín Arauco, constituyente de la región de Ñuble.

Convencionales de derecha, aseguran que han quedado fuera de la toma de decisiones ya que con 37 escaños, sus votos no se hacen imprescindibles para llegar a los dos tercios que establece el quórum. En esta Convención Constitucional de Chile, que es paritaria, los partidos de izquierda, integrados por tiendas políticas como Apruebo Dignidad, Movimientos Sociales Constituyentes y los independientes, son los que tienen mayor protagonismo. 17 escaños, además, están reservados para representantes de los pueblos originarios y desde el inicio se estableció que la Mesa Directiva renovaría sus cargos cada seis meses.

"Éste ha sido un proceso histórico muy significativo por primera vez que escribimos una constitución de forma democrática incluyendo los pueblos originarios de forma paritaria y además también incluyendo personas independientes que no pertenecemos a partidos políticos en ese sentido es así una experiencia que ha sido dura sido difícil ha sido muy desafiante pero también ha sido muy hermosa porque nos ha animado construir una constitución que supere la de la dictadura", señala Manuela Arroyo, constituyente del Movimiento de Defensa por el Acceso al Agua, la Tierra y la Protección del Medioambiente.

"¿Cual ha sido el tema mas complicado para ponerse de acuerdo? Yo creo que los temas más complicados para ponerse de acuerdo es el sistema político y eso explica en que no sistema político hay nada redistribución de poder se ha concluido que tiene que existir un bicameralismo asimétrico no dos cámaras espejo y una cámara revisora respecto. Esa arquitectura ha significado que el Senado deje de existir y eso ha generado mucha resistencia de los propios senadores", afirma Marcos Barraza del Partido Comunista de Chile.

Ahora bien, nos preguntamos, ¿por qué Chile apostó por una nueva Constitución? ¿Era absolutamente necesario? La cientista política Claudia Heiss nos explica.

"Antes era factible declarar propuestas inconstitucionales como la de tener por ejemplo, un sistema universal de cobertura de salud, por ejemplo, fue declarado universal o ciertas normas para donde el Estado interviniera en temas sociales, ese obstáculo es el que levanta en Chile la constituyente, pero eso no crea políticas publicas, solo abre la posibilidad, una que antes estaba vedada, con esta nueva constitución por lo menos ya no vamos a tener ese obstáculo que lo hacia imposible", sostiene Claudia Heiss, analista política.

El pasado marzo, el convencional Rodrigo Rojas Vade se vio obligado a renunciar tras descubrirse que había inventado padecer un cáncer y esta semana Nicolas Nuñez de la Federación Regionalista Verde emitió su voto mientras se encontraba en la ducha. Al respecto, el presidente Gabriel Boric ha dicho que no espera que la Convencional sea “un príncipe azul”.

"Hay cosas que no me gustan por supuesto, pero no espero que la convención sea un reflejo de todos mis deseos…hay quienes dicen, no me gusta esta norma, por lo tanto todo el proceso no vale. Hoy día por primera vez en nuestro país, estamos teniendo un proceso que es democrático que es paritario y que incluye a los pueblos originarios", señala Gabriel Boric, presidente de Chile.

Expertos coinciden en que el destino del gobierno del presidente más joven del América Latina está ligado al apruebo o rechazo de esta nueva Carta Magna que redactan para Chile. 20 millones de chilenos y chilenas decidirán si aceptan o no esta nueva propuesta el próximo 4 de setiembre.

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