El legado de Alberto Fujimori: Impacto y controversia
El legado de Alberto Fujimori, Epicentro Tv

El legado de Alberto Fujimori

La historiadora Cecilia Méndez y los exministros Luis Miguel Castilla, de Economía y Finanzas, Ricardo Cuenca, de Educación, hacen un primer análisis con perspectiva histórica sobre Alberto Fujimori y su posible legado.

La muerte del expresidente y exdictador del Perú, Alberto Fujimori, abre una polémica sobre el legado de sus dos gobiernos en la historia del país y el de sus 34 años de presencia en la política nacional. 

En la última edición del programa "Réplica", de Epicentro.Tv, la historiadora Cecilia Méndez, el exministro de Economía y Finanzas, Luis Miguel Castilla, y el exministro de Educación, Ricardo Cuenca, analizaron la herencia del líder del fujimorismo, condenado por corrupción y violaciones de derechos humanos y posteriormente indultado.

"Querramos o no, tenemos que reconocer que Fujimori fue un dictador popular, y eso es un problema que hay que estudiar, que no es raro en la historia del Perú", señaló Méndez.

La historiadora reflexionó sobre la tradición autoritaria del país. "¿Cuáles son los tres presidentes que han transformado el Estado, las subjetividades y han hecho cambios profundos en la sociedad? Han sido tres dictadores: (Augusto) Leguía, (Juan) Velasco y (Alberto) Fujimori", dijo.

"Han sido los dictadores en el Perú, más que los gobernantes en democracia, los que han podido ver cuáles son las necesidades populares y han podido satisfacer ciertas demandas que no han podido satisfacer las democracias. Cambiaron paradigmas e hicieron reformas", manifestó, y concluyó que por ello "muchos ven a Fujimori como un salvador, por el mito que él mismo se hizo de salvarnos de dos plagas.

Asimismo, Méndez aseguró que el legado de Fujimori ya está en el presente, en la forma actual de hacer política, en El Congreso y en el Ejecutivo.

"Estamos en un momento de apogeo del legado de Fujimori. Él se muere en un momento donde su legado es más vigente que nunca, el legado que muchos no quieren reconocer, el legado de la antipolítica, el legado de la corrupción", dijo, en referencia a este gobierno, caracterizado por la historiadora como "dictatorial".

Cuenca: "La cultura combi"

En el campo educativo, el exministro del sector e investigador del Instituto de Estudios Peruanos, Ricardo Cuenca, cuestionó que "en nombre de la liberalización de los mercados, de los servicios, también entraron a algunos servicios públicos estatales que terminaron generando un proceso muy caótico y muy informal, y eso fue la educación".

"En 1996 se liberaliza el mercado educativo, se promueve que la iniciativa privada forme parte para atender la demanda, y, sin mayor regulación, esta oferta crece de manera muy desordenada tanto en escuelas como en universidades, lo cual genera que se haya atendido una demanda muy grande pero perdiendo calidad", cuestionó Cuenca.

Recordó que durante el fujimorato se instaló la idea de que el Estado debía reducirse, que había que generar mayor autonomía en las escuelas y generar un sistema paralelo de privatización. "Y lo otro que pasó tuvo que ver con la incorporación del concepto de calidad educativa, que hasta antes de esta reforma no era parte de la discusión educativa", manifestó.

También se refirió a la "cultura combi" que se introdujo en la educación peruana durante la década del noventa.

"La ‘cultura combi’ se convirtió en el centro de la idea educativa, las escuelas de bajo costo son, de alguna manera, las combis de la educación y las universidades de bajo costo son de alguna manera las combis de la educación, esto que Danilo Martuccelli llamaba un proceso de ‘achichamiento’, que empezó en los 90 en el campo educativo", criticó.

Castilla: "No había otra solución"

Consultado sobre la necesidad de apelar al shock económico en los inicios del gobierno de Fujimori, el exministro de Economía Luis Miguel Castilla sostuvo que la crisis económica y el descontrol no dejaban pie para otra alternativa.

"El momento de aquel entonces ameritaba una política de shock porque teníamos una política muy mal manejada, con controles de precios, mercados negros, racionamientos, falta de abastecimiento y una hiperinflación que carcomió el poder adquisitivo y empobreció muchísimo al Perú. No había otra solución en ese momento", señaló.

Explicó, además, que dado el nivel de crisis, de descontrol de precios, de una economía en bancarrota y con reservas negativas, "no quedaba otra que esa salida". Por ello, indicó que el shock fue un "punto de inflexión".

"Obviamente, es por ello que, treinta años después, el Perú goza de una de las inflaciones más bajas de América Latina y en gran medida ello se atribuye a aquella dolorosa receta de shock que se tuvo que adoptar", señaló.

No obstante, Castilla lamentó que el gobierno de Fujimori no abordó el tema de la educación y de la productividad laboral, y, por ello, tenemos como trasfondo una economía informal.